martes, 25 de enero de 2011

Por qué.

Ella no lo entendía, no lograba comprender el por qué de aquella marcha. No una marcha física, una marcha amorosa. Él era la persona por la que sonreía todas las mañanas al levantarse, él era la persona perfecta, el mejor chico del universo y, sin embargo, notaba como él se iba alejando lentamente, como su amor se iba agotando poco a poco, como la chispa de su corazón se apagaba lentamente...
Al final, la ruptura, le destruyó el alma, ella no sonreía, no cantaba, no comía, no vivía...

2 comentarios:

  1. Pero al menos vio que el apocalipsis se acercaba... ¿Y si hubiera sido una mañana, en la que tras levantarse tan feliz, le hubiera caído el jarro de agua fría de la ruptura?

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  2. Sí, la verdad es que lo vio venir...
    Las rupturas son muy duras.

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