miércoles, 28 de abril de 2010

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Ese sentimiento que me invadía era totalmente nuevo... era el del amor.

martes, 20 de abril de 2010

Relato.

Hola a todos (:
Aquí os dejo el relato que he presentado para la Semana Cultural, no ha salido seleccionado, pero lo seguiré intentando al año que viene.
Un beso.

Inseparables desde la infancia

Queridísima amiga mía:
Sé que esta carta no te llegará, pero necesito expresar mis sentimientos.

Aún recuerdo el día en el que te conocí, tendríamos unos cuatro o cinco añitos, tú estabas muy callada y fui yo quien me acerqué a ti queriéndote conocer.
Poco a poco, el roce hizo el cariño, y fuimos intensificando nuestra amistad. Me invitabas a tu casa a comer, a hacer caramelos, me llevabas a tu pueblo…
Había gente que nos llamaba las inseparables, siempre íbamos juntas y pasara lo que pasara no nos separábamos. Cuando crecimos un poco más empezó el tema de los novios y las típicas tonterías de esa edad, pero aun así éramos indestructibles.
Llegó el momento de separarse a la hora de hacer la carrera, fue muy duro para nosotras después de tantos años juntas, pero lo superamos.
Habiendo formado cada una su familia nos reencontramos en nuestra ciudad natal, fue tal la ilusión que nos invadió que nos pusimos a llorar. Empezamos a quedar casi todos los días para recuperar todos aquellos años de alejamiento.

¿Te acuerdas de aquel día? Habíamos quedado las dos solas para comprarle el regalo de cumpleaños a tu marido, aquí no lo había y tuvimos que irnos a Cáceres a por él.
Cuando avanzábamos tranquilamente por la carretera a un hombre se le fue el coche y colisionó frontalmente con nosotras. Yo apenas me hice nada pero tú estabas gravemente herida, llamamos a la ambulancia rápidamente pero tú falleciste en el camino…
Desde entonces no soy la misma de siempre, después de haberte encontrado tras todos esos años te vas en un accidente de coche, ¿por qué?
Tus hijos siguen a delante como pueden, yo intento animarlos, distraerlos y hacer de madre, pero es muy difícil para ellos saber que ya no estás, que no te van a poder contar que se han enamorado, como ha sido su primer beso, que han aprobado todo, que el profesor les ha felicitado por su trabajo, que van a ser padres…
La que peor lo lleva es María, a pesar de ser la mayor tiene una edad muy difícil para asumirlo, ya sabes como son los trece años…
Pablo también lo lleva muy mal, ahora tiene tres años, y se pasa las noches enteras llorando, nota mucho tu ausencia.
Alberto creo que es el que mejor lo lleva, o el que menos muestra sus sentimientos, como tiene seis años se pasa el día jugando con mi hija, pero también llora tu pérdida. A él y a Pablo les hemos dicho que estás en el cielo porque has sido buena, y María cada vez que escucha decir algo de ti se mete en su habitación y se pone a llorar, la intento consolar, pero lo hace mejor mi hijo, ahora están saliendo juntos.

También quiero decirte que el día en el que te perdí me dí cuenta que tú has sido a una de las personas que más he querido, aquella amiga que siempre me sacaba una sonrisa cuando estaba triste, aquella que me escuchaba, aquella que me entendía, aquella que me decía “no te preocupes, ya lo conseguirás”.
Reflexionando entendí que no sabes lo mucho que aprecias a una persona hasta que la pierdes.

Nunca te olvidaré.

Tu buena amiga de la infancia.

jueves, 15 de abril de 2010

Es raro, es filólogo

Hola a todos (:
Esta mañana en clase he leido el artículo que os pondré a continuación, voy a poner dicho artículo porque me ha hecho reflexionar sobre lo que realmente soy y lo que quiero ser.
La gente puede pensar que soy rara, pero sin la literatura, la poesía o el amor no sería yo.


Soy filólogo. Dicho así, suena a confesión trágica: Soy alcohólico, soy drogadicto, soy ludópata... Filología, cuando yo la estudié, era una carrera muy común, éramos tantas chicas como chicos y de mi facultad salían cerca de 300 filólogos por promoción. Pero hoy, la Filología se bate en retirada. Si un hijo te dice que va a estudiar Filología, acabarás comentándole a su madre (o a su padre) que siempre sospechaste que el muchacho era raro. Si fuera mujer, pssss, pero tampoco. ¿A quién se le ocurre hacer Filología con las carreras tan modernas y con tantas salidas que hay hoy? Pues bien, resulta que no, que al revés, que el raro es usted, querido padre de futuro filólogo. Filología es una carrera extraña porque hoy no la estudia casi nadie, pero precisamente por eso tiene futuro. Esta semana se han celebrado en Cáceres unas jornadas sobre Filología Francesa y un mensaje ha llegado con nitidez: estos estudios universitarios no tienen paro. Nunca he conocido a nadie que estudie Filología por ser una carrera con grandes posibilidades de empleo (salvo quizás Filología Inglesa en su momento). Son unos estudios muy vocacionales que no permiten soñar con bienes materiales, sino con placeres espirituales como la palabra, la literatura y otras extravagancias. Pero hay un dato importante: un elevadísimo tanto por ciento de filólogos con empleo, o sea, profes de instituto, se van a jubilar dentro de 10 años y, estadísticas en mano, no hay 'mano de obra' suficiente para sustituirlos. Ya sabe, si su hijo quiere estudiar Filología, no lo desanime: es un poco raro, sí, pero tiene futuro.